Una mudanza debe planificarse con suficiente tiempo. Cuando piense en mudarse de casa es buena oportunidad para aprovechar a deshacerse de todo aquello que ya no utilice. Con semanas de anticipación debe conseguir materiales para empaque: Cajas, cinta de empaque, marcadores permanentes, etiquetas, papel para envolver o papel periódico. No espere hasta la semana o el día anterior a la mudanza para empacar.

Empiece por empacar todo lo que no necesita en ese momento. Empaque en cada caja aparatos o accesorios similares, por ejemplo, en una misma caja empaque los utensilios de cocina, en otra los juguetes, etc. Haga un listado del contenido de cada caja y peque la lista en un lugar visible. Numere cada caja. Utilice colores para identificar las cajas que irán en cada habitación, Si traslada cajas a la casa nueva con anterioridad a la mudanza propiamente de muebles, trate de dejar las mismas en una esquina donde no interfieran cuando le estén llevando los muebles.

Trate de no hacer las cajas muy pesadas ya que en el momento de la mudanza pueden romperse y se puede dañar lo que llevan dentro. Si tiene maletas, utilice éstas para guardar ropa y accesorios personales. Joyas, artículos de valor o accesorios muy pequeños NO los empaque para que se vayan en el camión de mudanza, acarréelos consigo ya que en cualquier momento se pueden caer. Los botes que pueden escurrirse como shampoo, detergente o lociones, guárdelos en bolsas separadas, preferentemente plásticas.

Utilice material de empaque como papel periódico para envolver todo lo frágil como platos, vasos, porcelana, espejos y rotule las cajas con FRAGIL para que el personal de la mudanza las manipule con más cuidado. Asegúrese de sellar con cinta adhesiva todas las cajas. Guarde en una caja por separado y bien identificada, todo lo que va a necesitar cuando llegue a su casa nueva, como cepillos de dientes, ropa de dormir, una mudada, etc. Notifique a los bancos, colegios y otros el cambio de dirección. Felicitaciones por su nueva casa..